Estuve de escapada por Sevilla este último fin de semana, que hermosa ciudad, me quedé enamorada de sus callecitas de piedra, de los carruajes y hermosos caballos, de la feria y sus múltiples casetas llenas de color, música y alegría, los trajes de las sevillanas (de eso absolutamente fascinada), los paseos en bicicleta, la Catedral, la Giralda, la Plaza de España, El Alcázar, la comida, el baile flamenco y el sevillano (traté de bailar aunque no con mucho éxito) en fin muchísimas cosas, tantas que creo que repetiré.
lunes, 4 de mayo de 2009
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